miércoles, 14 de marzo de 2007

Matar a un ruiseñor

Esta noche, venía leyendo en metro desde fuera de Madrid, y ahora, ya en casa, añoro las lecturas bajo tierra. Y digo añorar, porque ya no me concentro cuando, entre empujones y calores, intento leer en el metro. Es imposible. Antes disfrutaba. Tampoco me siento ya.

Además, leo Matar a un ruiseñor de Harper Lee y descubro una buena novela, en la que la apacible tranquilidad y rutina de una pequeña ciudad sureña se ve alterada por una relación fatal. Narrada por una niña rebelde y curiosa, Scout, que descubre junto a su hermano mayor algunas de las respuestas a la inocencia de su infancia. Dignidad, valor, hipocresía, locura, fantasía, …, tienen cabida en ambas, en la novela y en la película. De verdad. A mí me está gustando mucho porque, además, me hace recordar la película, de esas pocas veces donde alimentar los personajes de la novela con los ya conocidos de la versión cinematográfica es placentero. Gregory Peck interpreta a la perfección el personaje del padre, Atticus Finch. Realmente, afirmo que es su mejor interpretación sin duda, mucho mejor que como capitán Ahab.

Y todavía no ha aparecido Boo Radley.

11 comentarios:

Scout Finch dijo...

A mí me encantó el libro, por eso escogí mi apodo, pero todavía no me atrevo con la película, porque no quiero que me decepcione teniendo tan fresca en la memoria la novela, aunque algunas personas me han dicho que está muy bien. Tal vez más adelante.

¡Saludos!

Rfa. dijo...

Matar a un ruiseñor es una de las mejores películas de juicios que recuerdo. ¿Alguna otra? Senderos de Gloria, del pesado de Kubrick.

Anadja dijo...

Yo creo que es de las pocas "pelis de juicios" que me gustan, de hecho me encanta, y hace tiempo que pienso que me tengo que hacer con la novela... Adoro a Gregory Peck, y estoy contigo en que este es su mejor papel.

Miguel Carvajal dijo...

Si queréis una película "de juicios" sobresaliente: Testigo de cargo, del inmeso Wilder. Entre los cinco mejores directores de la historia. Protagonista: Marlene Dietrich.

Walter Kung Fu dijo...

No creo que sea solamente de una "peli de juicios", es mucho más que éso. Para los que no han leído la novela, recomiendo su lectura, y para los que no han visto la película, recomiendo igualmente su visión.

Yo de mayor quiero ser Atticus Finch. Y cuando sea pequeño, Scout Finch.

d. dijo...

¿De veras creéis que "Matar un ruiseñor" es una película de juicios? Para mí, sobre todo, es una película de infancia. Me acuerdo de la caja en la que los hermanos guardan las cosas que Boo deja en el hueco del árbol; los muñecos, ¿eran de cera, de miga de pan? Me acuerdo de los pantalones que se rasgan con una reja, del disfraz de jamón, de las historias de Atticus en el cobertizo, de cómo ruedan dos canicas y de cómo chocan...

Anadja dijo...

Por supuesto que no es sólo una "peli de juicios", y que se trata mucho más de una peli sobre la infancia, si no, estoy segura de que no me gustaría tanto. "Atticus Finch" es el padre que me gustaría para mis hijos, y creo que todos hemos sido un poco "Scout"...
Respecto a "Testigo de Cargo", como si es una snuff movie, viniendo de Wilder sólo podría ser
otra más de sus muchas y variadas obras maestras.

Walter Kung Fu dijo...

d., estoy de acuerdo contigo, es una mirada desde la infancia donde los niños juegan, pelean, fantasean, crecen y se enfrentan a la realidad. En resumen, se hacen mayores.

Los muñecos son de madera tallada.

Anónimo dijo...

Yo también añoro las lecturas en el suburbano y en autobús, más que nada porque a la mayoría les ha dado por haber a gritos y con eso la verdad, no puedo.

Y yo leo Tokyo blues...

Walter Kung Fu dijo...

Cuando ví Babel, creo que conseguí entender el personaje de la chica japonesa y su desorientación porque me recordaba a Naoko. Por eso siempre me gustará más leer que ver cine. Comprendes mejor los personajes y sus acciones.

David Cotos dijo...

Excelente película.