domingo, 24 de febrero de 2008

Perdidos. Tercera temporada.

Estos últimos meses he discutido con muchos de mis amigos sobre la tercera temporada de Perdidos, y se me ha ocurrido que tengo material interesante para enseñar. Igual que había hecho con las dos temporadas anteriores, mientras veía los episodios de ésta fui tomando nota de mis impresiones más espontáneas. Y, como sucedía con la primera y la segunda, el resultado es una mezcla de disparates improvisados, spoilers y observaciones más o menos curiosas. Si no habéis visto la serie, lo que viene a continuación os parecerá el desvarío de un idiota medio borracho que sacrifica horas de sueño para agonizar delante de la tele. Pero si la habéis visto, leer estas notas es como colarse en la mente de alguien que, poco a poco, va asistiendo al mayor milagro televisivo de los últimos años.

Capítulo 1.
Arranque flojo de temporada. Jack está encerrado en una pecera que es como el cielo, y una rubia con cara de buena le confiesa los pecados. Sawyer es un ratón de laboratorio.

Capítulo 2.
Kate sabe a fresa y Sawyer a galleta de pescado. Ésa es la única información útil que el capítulo proporciona, aparte de que los Red Socks ganaron el campeonato del mundo. El resto, las aburridas historias de Sayid y los coreanos.

Capítulo 3.
Desmond se parece a Jesucristo y cuenta las cosas que van a pasar como si ya hubiesen pasado. Tengo la impresión de que los guionistas trabajan para contruir tramas a largo plazo. Lo que aún no sé es si lo hacen para avanzar o para cerrar lo que dejaron abierto al final de la segunda temporada.

Capítulo 4.
Muy bien. Muy bien. Resulta que Sawyer vive en Alcatraz y que Jack detecta los tumores con sólo ver una radiografía durante un segundo. Gran capítulo, fin de disco.

Capítulo 5.
Adiós, Mr. Eko. Eras un gran personaje. Pero como dice John Locke, las casualidades no existen, sólo el destino. Tu destino, Mr. Eko, era palmar. Menos mal que nos has dejado algo a lo que aferrarnos: “¡los demás mueren después!”

Capítulo 6.
¡Yuju! Jack le abre la espalda a Henry Gale, Kate se folla a Sawyer y yo soy inmensamente feliz. ¿Qué va a pasar ahora?

Capítulo 7.
La rubia con cara de buena es, definitivamente, un personaje a considerar. Gran episodio. Sawyer y Katie se marchan de la isla pequeña con un trasunto de Alex, el prota de La naranja mecánica. Y Jack se queda quitando tumores.

Capítulo 8.
Desmond viaja en el tiempo y se encuentra a un hada madrina que le dice que no puede cambiar el futuro. Yo digo: “pobre Desmond”. Y Desmond dice: “no, pobre Charlie. Él es el que va a palmar”.

Capítulo 9.
“Jack anda entre nosotros, pero no es uno de nosotros”. Eso es lo que pone en su tatuaje, pero no sé si debería tomármelo en serio porque se lo escribió una pseudo prostituta tailandesa cuando estaba de vacaciones, tratando de volar una cometa.

Capítulo 10.
Las justificaciones de las tramas de esta serie son peregrinas. ¿Para qué necesito yo saber que Hurley sabe conducir una furgoneta? Para averiguar, al final del capítulo, que la hija de Rousseau está viva. Me aburro tanto…

Capítulo 11.
Nuestros amigos se encuentran con un tuerto granjero que habla ruso con los gatos. Hurley sabe jugar al ping-pong, John sabe jugar al ajedrez y Sawyer habla inglés cuando se encuentra en París con otros refugiados iraquíes.

Capítulo 12.
¡Buenísimo! ¡Kate y los demás llegan hasta el campamento de Los Otros y pillan a Jack jugando al rugby! Y lo más fuerte es que… ¡la rubia es su hermanastra! Por cierto… ¿qué fue de la furgoneta?

Capítulo 13.
No tengo palabras para describir la intensa felicidad que esta serie me produce. John Locke ha encontrado a su padre en el campamento de Los Otros. Y yo me muero. Sólo hay una cosa que no me ha gustado: ahora sabemos por qué se quedó paralítico, y la verdad sobre este tipo de cosas casi nunca está a la altura de las circunstancias. Es el momento más alto al que han llegado en toda la serie.

Capítulo 14.
¡Qué fuerte! ¡Alfred Hitchcock sale de su tumba y filma un episodio de Perdidos! Dos personajes enredados en una historia de ladrones y diamantes que no tiene nada que ver con la serie, pero que mola mucho. ¡Han innovado! ¡Alabado sea Hitchcock!

Capítulo 15.
¡Me aburro! Capítulo para pajilleros y para niños. La parte de los pajilleros es la historia de Kate y la rubia retozando en el barro. La parte de los niños es la de Sawyer buscando su corazoncito. ¿Y yo? Yo me he quedado sin diversión.

Capítulo 16.
Juliet se incorpora al campamento y descubrimos la verdadesra historia de los malos. O casi. Y justo al final del episodio, resulta que es mala. ¿Moraleja? No hay mejor personaje que el que parece bueno y es malo. O al revés. ¡Bueno!

Capítulo 17.
¿Por qué Desmond dejó de ser un monje y se convirtió en un visionario que recoger paracaidistas en mitad de la jungla? Una vez más, Charlie ha estado a punto de palmar. Y una vez más, por desgracia, ha sobrevivido.

Capítulo 18.
Tengo mucho sueño y no sé si me he enterado bien. Sun y Juliet, la china y la rubia ambigua, se han hecho una súper ecografía. Y del cielo ha caído una mujer que habla italiano y español, y que le cuenta que el avión del vuelo 815 se encontró sin supervivientes. Me aburro. Me voy a dormir.

Capítulo 19.
Escribo estas líneas mientras yazgo en el suelo, adorando la televisión que me trae Lost. Oh, padre nuestro que estás ahí, en lo más profundo de nuestro monstruo freudiano, gracias por hacer que Sawyer y John tengan que matar al mismo hombre.

Capítulo 20.
Cuando Ben era un niño era una mezcla entre Harry Potter y el crío de El Sexto Sentido, que veía a gente muerta. En la isla ha resultado haber una especie de jefe misterioso que se llama Jacob. Pero se parece a la madre de Psicosis.

Capítulo 21.
Charlie hace una lista con los cinco momentos más importantes de su vida, pero se le olvida uno: cuando sale del agua en la base submarina y se encuentra a dos amazonas apuntándole directamente a la cabeza. Oh, Dios, cuánto amo esta serie.

Capítulo 22.
- Walt: “Levántate y anda, John”.
- Locke: “¿Por qué?
- Walt: “Porque tienes un trabajo que hacer”.
(No puedo respirar. No puedo soportarlo. Los fantasmas reaparecen en la isla. Hay bases submarina y hubo un tiempo en que Jack tenía barba y se quería suicidar. ¡NO PUEDO SOPORTAR TANTA EMOCIÓN!)

Capítulo 23.
Sonrío. Todo va mal, como siempre. Acabo de ver el mejor final de una temporada en toda la historia de la televisión. No me importa lo que vaya a pasar ahora. No me importa porque estoy sonriendo. Me tomo la última copa de cava y me voy a dormir.

20 comentarios:

Fini Calviño dijo...

Yo debo ser de las poquitas que no ha visto perdidos....

Walter Kung Fu dijo...

Rfa., comparto en gran medida tus impresiones acerca de Lost, todavía frescas en mi caso, ya que el sábado acabé de visionar la tercera temporada junto con mi compañera de ingestión de capítulos. Después de haber oído o leído tanto sobre la excelencia de su último capítulo, me quedé un poco frío después de verlo. Tal vez decepcionado. Todavía estoy digiriendo su impacto así como el vacío que provoca finalizar una temporada. Para mitigar este efecto, ayer probamos a repasar los extras del disco 7 y confieso que me aburrí mucho.

Todavía no entiendo el porqué del capítulo 14, el cual no me gustó nada . Tampoco sus personajes.

Jack es un líder, no hay duda, pero está claro que la barba no le sienta bien. Mi personaje preferido, entre tantos, puede ser Desmond y su normalidad. Parece que juega en otra liga. Impresionante Sayid, siempre responde. Sawyer acaba desinflado. ¿De amor o de odio?. Y Locke, para no variar, va por libre, buscando su destino. ¿Y Kate? Maravillosa.

n. dijo...

Je, je, me encantan tus análisis de primeras impresiones. Me ha encantado tu descripción de "Stranger in a strange land", y la del que muchos consideran el peor capítulo de la historia de Perdidos, "Tricia Tanaka is dead". Por otra parte, me considero en parte culpable de alimentar las expectativas de Walter respecto al que yo también considero el mejor final de temporada de la historia de la televisión.

Con Perdidos tengo una curiosa relación amor-odio: me pasé la primera mitad de la tercera temporada despotricando sobre lo mucho que había perdido la serie, pero los últimos capítulos me hicieron recobrar la fe en este milagro televisivo. Y ahora, lo mismo me está pasando con la cuarta. Con 4 capítulos vistos, tengo una ligera sensación de decepción, pero tengo la confianza de que antes o después me sorprenderán y volveré al redil. Lo que realmente me preocupa a largo plazo es la casi total seguridad de que jamás va a haber una explicación satisfactoria a todas las preguntas que se han planteado. De todas formas, el viaje habrá merecido la pena.

Anónimo dijo...

Fini, ya somos dos...

NáN dijo...

Nous sommes deux nous sommes trois
Nous sommes mille vingt et trois

(Georges Moustaki, refiriéndose precisamente a esto)

María Rogel (Lapor) dijo...

así que además de estar perdidos son unos frivolillos...
En fin, no quiero cortar el debate y las impresiones isleñas o forcejeos y ligoteos que allí parwce que tienen lugar pero... MAGAPOLA: quería hacerte una consultilla prática: cómo haces para que no salga el artículo completo y que sólo al pinchar LEER MÁS continúe? ese truco me ha nectad y todavía no los conozco pero más me vale ponerlo en práctica y pronto o pierdo -de las parrafadas que suelto- a mis entrañables lectores! nada cómo utilizar con habilidad una elipsis, je je.. gracias!!saludoooooos

chus dijo...

cuatro

Rfa. dijo...

Si yo no hubiese visto Perdidos sentiría envidia por todos los que la han visto y aseguran habérselo pasado en grande. Por supuesto, LAPOR, considerar que ver una serie de televisión es un entretenimiento frívolo está lejísimos de mi concepción del mundo.

Anónimo dijo...

Nán, me encantan tus salidas, pero nuestro número aumenta: maintenant nous sommes quatre

Pues no sé por qué, Rfa., mucha gente se lo pasa en grande con cosas que he comprobado que para mí no. Además, si nosotros fuéramos tú no podríamos sentir envidia, porque ya la habríamos visto, jejeje.

Por cierto, mi concepción del mundo está llena de fabulosos entretenimientos frívolos, jajaja.

Tengo la risa floja desde ayer…

Walter Kung Fu dijo...

Al principio, me mostré bastante escéptico con la serie Perdidos, incluso la desaprobaba sin conocimiento de causa. Hasta que empecé a digerir capítulos. Después me enganché. Por otro lado, tampoco entiendo el porqué relacionar una serie de televisión como algo frívolo.

d. dijo...

Yo soy de los que han visto perdidos de pascuas a ramos, un poco con ganas de engancharse (sin lograrlo) y un poco por el "hay que verlo" que rodea a esta y otras series de la tele que ponen ahora.
Me he leído los comentarios en plan experiencia, a ver si en efecto me parecían "el desvarío de un idiota medio borracho que sacrifica horas de sueño para agonizar delante de la tele". La respuesta es que más o menos sí, sin lo de idiota que no estamos aquí para faltar. Te propongo que para la temporada 4 no separes el texto en capítulos, sino que lo pongas todo seguido. Quedaría mucho más delirante e inconexo, mucho más escritura automática. Las impresiones que percibo de tu resumen son: Lost te aburre, Charlie, Lost es un milagro televisivo, Kate, silla de ruedas, isla, Alfred Hitchcock...

n. dijo...

Hay tanto buen cine en algunos capítulos de Perdidos como en la mayor parte de (la sobrevalorada) No es país para viejos. Hay diálogos mucho más certeros en un capítulo cualquiera de Las chicas Gilmore que en toda la colección de frases de esa guionista treintañera que habla por la boca de una adolescente en Juno. Los abogados de Damages dan tanto miedo o más que los abogados de Michael Clayton. Hay mucha más ironía y mala baba en un solo capítulo de Arrested Development o Curb your enthusiasm que en la hora y media larga de Little Miss Sunshine.

Anónimo dijo...

Claro, n., si nadie lo niega, y menos yo que no he visto ninguna de esas series, pero ten en cuenta que para contar en una película tienes solo entre hora y media y dos, y en las series tienes... ¿horas y horas y horas y horas y horas?

Kichiaya dijo...

Yo no veo ni realities ni los grandes mitos de la televisión que ha visto todo el mundo, aunque la verdad quise empezar a aficcionarme a Lost, lo que pasa es que quizás ya era demasiado tarde y para empezar algo por la mitad prefiero no verlo.

María Rogel (Lapor) dijo...

Rfa. hagamos las paces. Puede que Perdidos nunca me me haya llegado porque veo poco poquísimo la tele y una de las pocas cosas qu veo es MUCHACHADA NUI (a punto de retomar) y para mí es ese capítulo de antes que parece que nubca acaba. Y la cabecera de Muchachada da subidón!

Rfa. dijo...

Yo, sin embargo, no me engancho a Muchachada Nui. A veces lo veo y me hace gracia, pero no consigo fidelizar. Eso sí: me fascina que hayan conseguido conectar con toda una generación, la nuestra.

dintel dijo...

La verdad es que no sé cómo solucionarán tanto misterio para que todos los que seguimos la serie quedemos medianamente contentos. Hasta ahora, han ido abriendo interrogantes cuyas respuestas lógicas hemos tenido que ir descartando a lo largo de los capítulos... ¿qué pasará?
Estoy ansiosa por la cuarta temporada.

Antikhristas dijo...

¿Qué tendrá esta serie que os trae tan locos? tendré que ver algún capítuño para poder conversar con vosotros...

Pat dijo...

Y yo que pensaba que la entrada era larga, y los comentarios lo son más...
El capítulo final me llenó de tan mal rollo y de una congoja tan intensa que se me olvidó si el oso polar existe o no o si las ondas electromagnéticas provocan esterilidad.
espero con ansiedad tener tiempo para la cuarta...

Pat dijo...

Lo que deja claro es que es dificil acertar con la elección de tus actos. Y más en esa isla.