lunes, 10 de julio de 2006

Golpe físico y verbal: Zidane y Materazzi

Está claro que Zidane le dio un cabezado en mitad del esternon a Materazzi, y también está claro que nadie trata de justificarlo. El golpe físico lo captaron las cámaras. Pero lástima que nadie pudiera captar las palabras que Materazzi le dijo a Zidane, el golpe verbal, y que le hicieron darse la vuelta y pegarle un cabezazo tan fuerte como aquel último que, lástima, no fue gol. Dudo que lo que le dijera fuera muy deportivo, de hecho Materazzi tiene un hitorial bastante “chungo”. En el patio del recreo diríamos que empezó Materazzi… ¿se defendió Zidane? Materazzi no lo confesará… ¿sacará Zidane a la luz ese golpe verbal que recibió de Materazzi? ¿Alguien sabe leer los labios en italiano?

8 comentarios:

Walter Kung Fu dijo...

Ese tipo de tensiones y de provocaciones, desgraciadamente, forman parte del fútbol y deben de ser aceptadas por los jugadores. Son profesionales, ¿no?.

No creo ésta haya sido la primera vez que Zidane ha sido provocado dentro de un encuentro. Sinceramente, esta vez Zidane se equivocó. Al menos, demostró ser humano.

Además, creo que para el bien del fútbol y de nuestras inocencias, ésas palabras no deberían hacerse públicas nunca. Deben de quedarse dentro del campo.

Antikhristas dijo...

Estoy con Walter, hay que ser profesional por encima de todo. No vamos a hundirle más de lo que él estará, pero es una pena despedir una carrera deportiva tan brillante de esta forma, y menos en la final de un mundial. Seguro que se hubiera llevado el balón de oro de no haber sido por el cabezazo...Espero que este cabezazo sea recordado como una ane´cdota y no empañe la carrera del astro francés.
Seguro que en "La hora Chananate" nos enteramos de la conversación.

Rfa. dijo...

Cuando era joven leí LA INMORTALIDAD, de Milan Kundera, y me quedé maravillado. El escritor checo hablaba sobre las diferentes maneras de perpetuarse en la memoria colectiva. La mayor parte de los genios y los grandes hombres son siempre recordados por sus méritos. Es lógico. Pero cabe la posibilidad de que el destino te juegue una mala pasada y termines gozando de lo que Kundera llamaba una "inmortalidad ridícula". O lo que es lo mismo: ser ZIDANE (con todo lo que ello implica, no nos vamos a poner a explicarlo a estas alturas, dejémoslo en mayúsculas) y terminar siendo recordado como el bruto del último partido. La pregunta es: ¿pensáis que una estupidez tan enorme como la que él cometió eclipsará toda su trayectora de cara a la Eternidad? ¿O lo olvidaremos y nos quedaremos con su fantástica bolea en la final de la Copa de Europa? Ay, la memoria es tan caprichosa...

Anónimo dijo...

...mi hijo ahora se dedica a dar cabezazos a sus contrincantes en las canchas del barrio en medio de los partidos, dice que quiere ser como Zidane, tener pasta hasta aburrir, la genialidad del astro en sus botas, y las, no pocas, idas de olla orgullosas e infantiloides del mismo (si con ellas, menuda asociación, consigue todo lo anterior), no quiero esa educación para mis hijos futboleros...

Anónimo dijo...

Sinceramente, no creo que el deseo que tiene su hijo de tener pasta y no hacer nada en la vida se la haya inculcado Zidane... Zinade no es un educador y desde el punto de vista adulto su actitud es un error en un juego que en el que la presión es muy fuerte. Y actitudes como esta o los insultos, desgraciademente, no sólo se ven en el campo de juego, sino también ene las gradas e incluso en las propias casas con madres, padres, hijos y hijas con el televisor encendido. Pero explicarle eso a los niños es cosa de los padres, no de los jugadores ni de los que pagan la entrada para desfogarse (qué pena que el futbol sirva para eso y no para disfrutar de un buen juego).

Magapola

Rfa. dijo...

Uno: firmemos nuestros comentarios. Cada vez que alguien escribe algo en un blog y no lo firma, Dios mata a un gatito.

Dos: ¿quién fue el primero que dijo aquello de "los niños de hoy son violentos porque conviven mucho más con la violencia"? Deberían darle derechos de autor por la frasecita de marras y que se retirase a una isla desierta a vivir de las rentas. Los niños siempre han sido violentos. Si el hijo de esta persona anónima pega cabezazos hoy, hace cincuenta años habría ido con el tirachinas reventando los ojos de los gatitos.

Tres: si alguien es capaz de enumerar sólo tres "idas de olla orgullosas e infantiloides de Zidane", que lo haga. Y que firme, carajo, que no quedan gatitos.

Cuatro: Zidane es la única persona a la que mola ver sudar. Cuando veo sus primeros planos ralentizados, cuando veo cómo le caen gotas eternas de la barbilla, siento el poder de la épica. Sólo por eso ya deberíamos permitirle cualquier cosa. Hasta dejar comentarios sin firmar.

Cinco: ¿qué tiene de malo que el fútbol sirva para desfogarse? Yo salgo todos los días a correr por el parque para desfogarme. ¿Debería dejar de hacerlo? ¿Me parará un guardia para quitarme puntos? ¿Morirá algún gatito?

Anónimo dijo...

Materazzi llamó terrorista a Zidane... Dé gracias, Anónimo, de que su hijo no quiera ser como Materazzi. Siguen mueriendo los gatitos.

Magapola

mikto kuai dijo...

Para empezar, y levantando una lanza en favor del usuario anónimo, debemos recordar una cosa, los niños son unos imita monos, todos hemos sido niños, y cuando uno es un canijo se dedica a aprender, entre otras cosas (como con la experimentación) a base de la imitación, así pues, es una vergüenza que un señor del nivel mediático en el que está Zidane haga lo que hizo en una final de la copa del mundo, ¡en una final de la copa del mundo!, cuando millones de personas se están tragando algo que sólo ocurre un día cada cuatro años; incluso si pasamos de aquello de la imagen y demás (este es un juego, el de dar cierta imagen, de lugares comunes y apestosos en el mundo del fútbol) simplemente comentaría algo que se llama elegancia, algo de lo que este señor Zidane sabe mucho si nos cernimos únicamente a su capacidad para el juego, no así a sus comportamientos más allá del juego en el propio campo (luego paso a citar tres o más idas de olla de Zinedine).

Me parece estupendo que el fútbol sirva para desfogarse, hay muchísimas cosas con las que hacerlo, incluida el fútbol, cada cual es libre de elegir lo que quiera para desfogarse, pero hay formas y formas de hacer este desfogamiento, e ir a un recinto a decir cincuenta palabrotas por minuto mientras escupe uno misiles salivares por la boca, y mientras el chavalín de turno que se sienta tres asientos más allá escucha todo aquello (aparte de las proclamas racistas, fascistas y xenófobas de ciertos sectores de la grada) pues sinceramente me parece una de las maneras más perniciosas que hay de desfogación (se, por supuesto, que no todos se desfogan así en el fútbol, afortunadamente, y que muchos también incluso se divierten viendo este deporte, de hecho, yo lo hacía con frecuencia, y ahora con cuenta gotas, que la diversión en él ya está reñida con la moneda a unos niveles asfixiantes). Y hablo con conocimiento de causa, que algo de experiencia tengo en campos de fútbol (concretamente diez, justo los mismos, otros diez posteriores, que llevo de desenamoramiento continuo de este deporte); unas cuantas razones me han llevado a darle casi toda la espalda, aquí no las voy a enumerar, pero son muchas y jugosas, por no decir asquerosas. Yo, personalmente no voy a desfogarme cuando veo un partido de fútbol, voy a divertirme.

En cuanto a lo de qué pudo decirle Materazzi para que Zidane reaccionara así, ni lo se ni me importa, basta ya de justificar a Zidane porque Materazzi le llamó lo que le llamara (me parece curioso que usted Magapola, sepa con seguridad que le llamó terrorista, cuando ni Zidane así lo ha dicho, ni Materazzi -que él sí que ha dicho algo sobre lo que le dijo a Zinedine, sea cierto o no-). Yo reprocho todo este tipo de actitudes sucias en el campo, insultos y agresiones, pero no justificaré unos con las otras y a la inversa. Actitudes infantiles de niño de teta como las de Zidane y Materazzi son las que continúan manchando ese maravilloso deporte qué es el fútbol, deporte que ya de por sí está manchado casi hasta la extenuación.

A continuación les relato tres o más idas de olla de Zidane (jugador expulsado 14 veces -11 de roja directa-, no esta mal, eh, a lo largo de su carrera):

1. Empecemos por la última, el-cabezazo-a-lo-street figter-yo-me-lo-guiso-Materazzi-se-lo-come. No hace falta que de más datos, todos hemos visto lo que ocurrió (y si no, ponga usted "cabezazo zidane" en google, no tiene pérdida).

2. Octubre de 2000, liga de campeones, Juventus-Hamburgo, (segundo 35 del video de youtube). Otro cabezazo. Vaya, se le da tan bien jugar a la pelota como dar cabezazos (seis partidos de suspensión).
http://www.youtube.com/watch?v=JD5SxbM74Zk&search=juventus-hamburg

3. Mundial de Francia de 1998, pisotón a un jugador de Arabia Saudí (dos partidos de suspensión).

4. 1995, militando en el Bordeaux, codazo al alemán Fink, tarjeta roja.

(…)


Y aquí, un vídeo que se han currado, para que también se vea que a Materazzi le va la marcha.
http://www.youtube.com/watch?v=rKGcUr0S-FU&search=francia%20zidane

No dudo de que Zidane ha hecho un fútbol maravilloso a lo largo de su carrera, yo lo he disfrutado, jugadas suyas me han erizado los pelillos de la emoción, la pena es que este hombre también se va al extremo contrario y de vez en cuando nos ofrece también actitudes que nada debieran tener que ver con el fútbol.