miércoles, 28 de junio de 2006

Pensamientos tras la derrota.

Bueno, ya está. España ha perdido en el mundial. El País lo trae en portada con una foto antológica, y casi todos nos hemos levantado un poco desilusionados. No pretendo hacer de esta derrota un asunto trascendental, pero sí tengo algunas reflexiones que EXHIBIR. Algunas son fruto del despecho y otras, simplemente, del sentido común. Ahí van.

  • Soy un pedante. Cuando Francia nos gana trato de encontrar consuelo y sólo lo encuentro en cosas como El Cantar de Roldán, lo cual es algo bastante chungo. Me acuerdo de un rey francés que se peleaba todo el tiempo con Felipe II y que luego, el pobre, se murió en una justa de caballeros, en el patio de su castillo. ¿Comprendéis? Son todo cosas sobre las que nadie hablaría en un foro de fútbol, cosas intelectualoides y muertas.
  • El himno de España mola más que el himno de Francia. Basta ya de cantar la Marsellesa como si fuera el himno de himnos. Gracias a Alonso-Pelayo, que gana por España y por Renault, hemos descubierto la cruda realidad: la Marsellesa es un coñazo del que sólo se salva, para que nos entendamos, el estribillo. Ya lo dije ayer y lo digo hoy: lo breve, si bueno, dos veces bueno.
  • Me irritan los españoles que no quieren que España gane. Puedo entender que no te guste el fútbol, estés en Berlín y te apetezca más beberte una cerveza que ver el partido. Y ya está. Pero no comprendo que animes a Francia porque mole más, o por tocar los cojones a tus colegas. Igual que no entiendo a quien dice que preferiría ver perder a España sólo por no aguantar a todos los descerebrados que celebrarían su victoria. Una cosa es que gane tu equipo, y otra que lo celebren los tontos, ¿no?

En fin...

Rfa.

9 comentarios:

Antikhristas dijo...

Una diferencia entre españoles y franceses es que los franceses no tienen por qué ser españoles para animar a la selección de España simplemnte porque les gusten más los jugadores o piensen que es la mejor selección, pero parece que a los españoles les da rabia que un español anime a otra selección, sea por el motivo que sea...

Magapola

Anónimo dijo...

Bueno, vamos a ver:
Imagina que eres francés, que estás en una casa francesa viendo el partido de España y Francia y que todos a tu alrededor son franceses que animan a la Selección Francesa... menos tú, que animas a España. ¿De verdad piensas que te respetarían? No seamos ingenuos. Una cosa es que la cultura francesa mole, querida Magapola, y otra bien diferente que los franceses sean gente estupenda y súper sana. Joder, que son tipos como tú y como yo, con sus debilidades y todo eso. ¿Es que no has visto cómo chinchaban a los hinchas españoles después del partido? Eran una panda de gilipollas, casi todos. Igual que lo habrían sido los de España o los de Ghana, de haber ganado. Dejémonos ya de estereotipos, por Dios, y asumamos que se puede animar a una selección propia sin ser facha ni descerebrado.

Rfa.

Anónimo dijo...

Madre mía, si tuviera que hacer amigos a través de este blog, es más, si esto fuera Match.com, no se si iba a contactar contigo... ¡¡Déjanos vivir!!

Anónimo dijo...

A mi lo que más rabia me da es que lo francés siempre mole más que lo español, o que lo español, lo nuestro, sea lo que sea, lo que somos y de donde venimos no sea digno de admiración y culto, sino de rechazo o vergüenza.

Parece que siempre tuvieramos complejo de ser español, y no creo que sea peor que ser francés, italiano o inglés. Es como el chiste.

Walter Kung Fu

Antikhristas dijo...

Ni lo francés mola más que lo español ni lo español, por ser uno español, le tiene que molar a uno. Y por favor, no me digáis ahora lo que me tiene que gustar o no, y menos con base en un criterio "nacionalista"...
La selección española de futbol me la trae sin cuidado y si quiero ir con la selección francesa en un partido pues me alegraré si ganan y lo sentiré si pierden, pero no lo sentiré más o menos por Francia ni por los franceses, sino por el partido en sí. Y no lo sentiré nada por la selección española, ni por España ni por los españoles, porque el ocio que dan sus partidos yo no lo consumo... y el dinero que da no va a mis bolsillos.
MAgapola

Walter Kung Fu dijo...

Siento herir sensibilidades pero yo no me refería al fútbol sino a ése sentimiento general de inferioridad que siempre tiene el español frente al francés, o si se quiere, de adulación de lo francés frente al rechazo de lo español.

Yo no digo que tenga que gustarle a uno lo español por ser español, sería ridículo, pero me cansa ya tanto aquello de "lo francés mola por el simple hecho de ser francés".

Además, afirmo que mi organismo y mi mente rechazan cualquier sentimiento nacionalista, provenga de donde provenga. Son un lastre.

Walter Kung Fu dijo...

Yo también pasé por ésa época de fascinación por lo francés y lo afrancesado. A todos nos pasa. Y también, afortunadamente, se pasa.

Antikhristas dijo...

A ver, pongamos las cosas en su sitio... WKF, hablas como un viejo de su adolescencia. Yo ya he pasado esa época también, la adolescencia me refiero. Veamos: estás con unos amigos españoles y tú eres española y juega la selección española un partido de fútbol contra una selección extranjera; como el fútbol te da igual, te has apostado 50 (por llevar la contraria) que la selección española no va a llegar a jugar la final; como si pierde contra ese partido que en ese momento vas a ver con tus amigos se descalifica, vas con la selección contra la que juega la española, para ganarte ya los 50. Posibilidades:
1 que juegue contra la selección somalí: tus amigos pasan de ti y te creen una ilusa, incluso te pueden mirar bien y todo.
2 que juegue contra la selección francesa: tus amigos te echan miradas de reojo y te dicen <<¡yá te vale!>> y se te echan encima (verbalmante) cuando te levantas de la silla gritando jaleando un gol de los fraceses y te dicen que lo español blabla y lo francés blabla.

¿No hay sentimiento de inferioridad en los amigos respecto de los francés? ¿No hay nacionalismo español contra lo francés en esos amigos?

Magapola

Walter Kung Fu dijo...

Querida Magapola,

estamos destinados a no entendernos. Tendré que mejorar mi redacción para ver si me hago entender mejor. Siempre pensé que es muy dificil que lo que se escriba se lea con la misma intención.

No quiero pecar de españolista o antifrancés, no es esa mi preocupación, ni siquiera hablar de fútbol.