Concurso de críticos
No sé si existen muchos concursos sobre críticas, pero deberían proliferar, más que nada porque así como no cualquiera escribe un libro, parece que todo el mundo está capacitado para escribir una crítica, ya que se asimila a opinión, y todo el mundo la tiene.
Es una lástima que este concurso tenga como requisito estar matriculado en alguna universidad, pero si lo estás y te atreves… Es sobre la película Shutter Island, de Scorsese:
Si lo tuyo más que rodar es escribir, ahora puedes demostrar tus habilidades participando en el 1er Concurso Internacional de Crítica Cinematográfica, donde tu trabajo será valorado por los miembros de la prestigiosa revista de crítica, Cahiers du cinéma. España creada en 1951 por Andre Bazin y en la que han escrito con pasión y lucidez al mismo tiempo, los cabecillas de la Nouvelle Vague: Truffaut, Rohmer, Chabrol, Rivette y Godard, entre otros muchos.
Y ahora entre nosotros, ¿cuáles son vuestros críticos favoritos?
6 comentarios:
Los más cítricos. Pero luego no les hago demasiado caso.
Los que no son Carlos Boyero, en general.
Ni idea.
A mí me gusta Manuel Rodríguez Rivero, que es entre columnista de opinión y crítico, eso sí, es fan fan de Tarantino.
Hoy entrevistan los internautas al crítico cinematográfico, amado y odiado a partes iguales, Carlos Boyero.
En cine, lo confieso, me gusta Boyero. También me hace gracia el universo de Jordi Costa, plagado de referencias cultas a la serie B y de reivindicaciones inesperadas que me hacen troncharme de risa. Hace un par de años escribía en ABC un tipo cuyo nombre he olvidado, pero que se sacaba de la manga unas cartas a directores bastante jugosas. Me suena que ya no está, pero tengo dudas. Ah, y me leería el nuevo libro de Juan Ramón de Prada, aunque él sea un poco odioso.
En televisión me encantaba la columna de Enric González porque era perspicaz y se las apañaba para reflexionar al mismo tiempo sobre tele y realidad, (que no tele-realidad). Pero se lo cargaron por bocazas.
En literatura estoy con Magapola, me divierte muchísimo Manuel Rodríguez Rivero con su erudición y su falta de tapujos a la hora de contar las vergüenzas del mundo editorial. También me gusta el estilo rápido de Marcos Ordoñez, en teatro, aunque me aburre cuando describe demasiado.
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