viernes, 19 de septiembre de 2008

Gram Parsons


Hoy hace 35 años que murió Gram Parsons con sólo 27 años. Puede que la historia oficial no le haya hecho un hueco entre sus grandes nombres, pero hablar de Gram Parsons es hablar de uno de los personajes más influyentes y fascinantes de la historia de la música. Nacido en el seno de una rica familia sureña venida a menos, la vida de Gram Parsons tuvo siempre los tintes trágicos de una obra de Tennessee Williams. Por poner un ejemplo, su madre murió de intoxicación etílica el mismo día que Parsons se graduaba en el instituto. Pocos años más tarde él mismo moriría por una sobredosis de tequila y morfina tras pasar varias semanas encerrado en una cabaña en el Parque Nacional del desierto de Joshua Tree. Pocos días después de su entierro, y para cumplir sus últimos deseos, sus amigos de correrías robaron su cadáver y lo quemaron cerca del lugar donde había pasado sus últimos días. Así nace una leyenda, qué demonios.

Es difícil calibrar la influencia de la obra de Parsons. Sin él, probablemente no existiría el country-rock tal y como lo conocemos. Puede que los Stones nunca hubieran grabado "Wild horses", o que grupos como Bright Eyes, Wilco, Jayhawks o Beck se hubieran dedicado al rock ochentero. O que nadie hubiera descubierto a la portentosa Emmylou Harris, con la que cantó algunos de los duetos más emocionantes de todos los tiempos. En cualquier caso, desde aquí queremos rendirle este pequeño homenaje.

Canción: "Sin city", de The Flying Burrito Brothers ("The gilded palace of sin", 1969)

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Me ha encantado la canción y sinceramente necesitaba ese tono que tiene en este moemento.

El otro día estuve habalndo de la de gente que ha muerto a los 27 años precisamente...

Walter Kung Fu dijo...

Que tendrán estos personajes de trágica (y corta) vida, con enorme talento artístico, que tanto nos gustan. ¿Esnifaría Keith Richards también sus cenizas?

Totalmente de acuerdo en lo que dices acerca de la influencia que tuvo en la música, sobre todo para abrir el country hacia el rock. Alguno de los discos a los que siempre vuelvo son Sweetheart of the Rodeo (1968) de los Byrds y GP (1973), su primer álbum en solitario y regalo vuestro por cierto, donde aparece la tremenda She.

No conocía esta versión de Love Hurts.

ANA HIMES dijo...

Eooo, qué guay! Acabo de descubrir tu blog y me da a mí que me voy a pasar a menudo ;-)

Si quieres puedes echar un vistazo a los míos (uno de música y otro de relatos y cosillas)

Rfa. dijo...

Qué casualidad, precisamente estos últimos días lo único que escucho son los dos discos de GP en solitario. Yo llegué a él a través de los Stones y siempre me conmovió la relación que tuvo con Keith Richards. Tipo simpático y noble, este Keith. Dicen que cuando eres su amigo nunca te deja salir de la habitación sin preguntarte antes: "¿a dónde te crees que vas sin mí?". Cuando me los imagino juntos a los dos me viene a la mente esta foto que les hicieron después de una noche de farra en pleno desierto. Están Keith, Gram y (creo) Anita Pallenberg, los tres vestidos de indios entre escorpiones. Como bien dices, n., años más tarde el propio Gram Parsons acabaría enterrado en estos pedregales. Más que una foto de rockeros, lo que me parece es una foto de colegas. No me extraña que al final sus amigos acabasen robando el cadáver en un gesto de lealtad póstuma.

Anadja dijo...

Precisamente, Walter, yo supe de Gram Parsons por ese disco que dices que te regalamos... Discazo...
Me quedo con los duetos con Emilou Harris y con la anécdota póstuma del robo del cadáver por parte de sus amigos...
Tremendo hasta en el último momento.