martes, 6 de noviembre de 2007

Once

Después de un fin de semana de verdes y otoñales impresiones, ayer tocaba ir al cine y la película elegida fue Once, ganadora del Premio del Público del pasado Festival de Sundance. Once es una historia emocionante y sencilla, vertebrada a través de las composiciones cantadas e interpretadas por sus principales personajes: un músico callejero que se gana la vida tocando canciones populares durante el día, las que más beneficios le reportan, y temas propios durante la noche, y una joven checa que, cuando no trabaja o atiende sus responsabilidades familiares, gusta de tocar el piano en una tienda de instrumentos musicales ante la imposibilidad de tener uno en propiedad. Ambientada en las calles de Dublín, Once es un musical atípico donde, afortunadamente, no se baila, sólo se cantan e interpretan canciones de (des)amor, las cuales sirven de hilo conductor en la evolución y construcción de la pareja protagonista, emparentados por su pasión por la música y quién sabe por qué otras cosas más.

Aunque no me gusten los musicales, quería poner a prueba mi nivel de tolerancia con esta película. No siendo un peliculón, y sobrándole algún que otro tema musical, es una buena manera de empezar la semana, yendo al cine para salir agradado. Además de la elección del casting, músicos casi todos y dignos en su papel de actores, me gustó la descripción del proceso creativo en la composición de los temas, lo cual me hizo suponer lo bien que se lo tienen que estar pasando los Solletico en sus ensayos de salón.

10 comentarios:

June Fernández dijo...

Como os dije, me encantó Once. Porque me encantan las historias de gente sencilla y especial a la vez. Buenísimas las escenas de la protagonista arrastrando la aspiradora por la calle o caminando en zapatillas de casa con toda la naturalidad del mundo. Creo que sacar a personajes auténticos, sinceros, imperfectos y espontáneos, y prescindir de artificios es siempre un acierto, o al menos a mí me gusta.

Alguna canción tal vez sobraba, pero me parecieron preciosas y no parecían metidas con calzador.

El final (que por si acaso no cuento) me removió ciertos miedos personales así que no me fui muy contenta de la sala. Pero reconozco que es un buen final: da pie a alargarlo con la imaginación y mantiene el tono agridulce de la peli.

Por cierto, hoy he descubierto el post de Anadja sobre cine erótico y porno. Qué pena perdérmelo en su día porque he visto hace poco Shortbus, Nine Songs, Intimacy y demás (con Fóllame sólo he aguantado cinco minutos). Yo creo que Nine songs (que no me disgustó y si me puso o no lo diré en un post en el que alguien más hable de sexo) demuestra algo: que el sexo aburre. Hubiera acortado la peli a la mitad. Así que la idea de porno para mujeres no me motiva demasiado aunque a veces lo reivindique. Ahora está de moda eso llamado post-porno, en el que se suele tener en cuenta la perspectiva de género, pero no he visto nada así.

Así que la solución, ¿será hacer algo tipo Nine songs pero en cortometraje y tal vez con más magia y tensión? No sé, igual ni eso. Yo creo que no hay más sugerente que una buena escena de sexo dentro de una película tradicional. Como dijistéis muchos, a menudo es más estimulante la tensión y la seducción que los planos explícitos. Así que mejor olvidarse del porno y seguir recordando esas escenas que nos han marcado.

Nahum dijo...

Umm, yo la vi acá en NY y la verdad es que me dejó más seco que un espárrago murciano. Y eso, eso es imperdonable para un "musical"...

Anónimo dijo...

Tengo tántas películas pendientes...

Anadja dijo...

Yo estoy deseando ver 'Once', seguro que me va a gustar, no sólo me fío de Walter, sino que además coincido mucho con June, (incluso en el exótico, apellido, jeje). Adoro las historias de gente sencilla y especial a la vez. El problema es que ese tipo de personajes no suelen resultar auténticos (véase los de Fernando León), pero cuando se consigue, son deliciosos,(véase Isabel Coixet en sus primeras pelis, que no en las últimas)...
Ya os contare....

Y June, dentro de nada me tienes escribiendo de sexo otra vez, gracias por revivar la cuestión...

Walter Kung Fu dijo...

Pensé en poner algún video con alguna de las canciones, pero como ninguna me gustaba lo suficiente opté por el póster de la peli. Como dice mi compañera de cine, nunca sonarán mejor que en la sala.

Paco Becerro dijo...

No la he visto, pero he oido que "para ser un musical" es digna de ver.

A mí tampoco me gustan los musicales como´género pero reconozco que algunos concretos sí me han llegado a gustar.


Cuanta gente escribe en este blog. Eso para un "perezoso" como mi blog sería una facilidad.

Un saludo.
El futuro bloguero desde Lazy Blog

Walter Kung Fu dijo...

¿Digna?, igual es un poco excesivo pero es agradable de ver.

Supera tu "pereza" y anímate hombre. Sí, somos muchos, así que esperamos tenerte por estas conversaciones, en las que no se está mal. Si no, nos veremos por tu zona.

BUDOKAN dijo...

Tengo este film listo para ser visto. Qué bueno que ya hayas podido hacerlo. El punto de partida suena genial. Saludos!

June Fernández dijo...

De todas formas, meterlo en la categoría de musical da pie a malos entendidos. La gente se lo imaginará como Al otro lado de la cama, por ejemplo, que los protagonsitas se ponen a cantar de manera bastante teatrera sin venir a cuento. Creo que en Once es más destacable lo que tiene de película intimista, por decirlo de alguna manera.

Pat dijo...

Me ha picado la curiosidad. Espero que siga en cartel cuando vuelva a ir al cine...